Reseña
Splendor
Uno de los mayores éxitos de Asmodee, del mundo de los juegos de mesa en general y, de los juegos familiares en particular. Una verdadera joya para la que siempre debería haber un sitio en toda ludoteca.
En Splendor nos pondremos en la piel de un maestro artesano del Renacimiento y, trataremos de construir el más prestigioso imperio comercial acumulando riquezas, comprando minas y medios de transporte, contratando artesanos y, consiguiendo el favor de los nobles.
Splendor es una carrera con el resto de jugadores para ver quien tiene más puntos al final de la partida. La partida termina en la ronda en la que un jugador llegue o, supere, los 15 puntos de prestigio, pero, ser el primero en alcanzar dicha puntuación, no nos garantiza ser el ganador del juego, pues la partida no termina definitivamente hasta que todos los jugadores hayan jugado el mismo número de turnos.
Los puntos los obtendremos por dos vías, comprando ciertas cartas en el mercado y, consiguiendo el favor de los nobles.
Gestionando nuestros recursos, en este caso, en forma de joyas y oro, compraremos cartas. Pero no todas las cartas dan puntos. Existen tres niveles de cartas y, las más accesibles, las de nivel 1, no suelen dar puntos. Las que no dan puntos, serán las primeras que obtendremos y, nos servirán para empezar a construir nuestro motor de compra.
El motor de compra se potenciará con cada carta que compremos durante la partida, ya que, todas ellas proporcionan un bonus en forma de descuento permanente a la hora de comprar las subsiguientes cartas. De ese modo, conforme avanza la partida, las cartas caras, las que dan puntos y son inalcanzables al principio de la partida, se irán volviendo progresivamente un objetivo cada vez más viable para nosotros.
Por otro lado, las losetas de nobles, funcionan con la mecánica de completar contratos. Cada loseta de noble exige unos requisitos distintos a las demás para poder hacernos con ella. El primer jugador que complete los requisitos que pide un noble, se quedará con su ficha y, con los 3 puntos que éste otorga.
Splendor ha llegado a ser considerado todo un clásico dentro del mundo lúdico por méritos propios y, los siguientes datos avalan tal afirmación:
- Ganador al Mejor Juego Familiar de los premios Board Game Quest Awards 2014
- Nominado a Mejor Obra de Arte y Presentación de Juegos de Mesa de la Golden Geek 2014
- Ganador del Mejor Juego de Mesa Familiar de la Golden Geek en 2014
- Ganador del Mejor Juego del Año de la Golden Geek 2014
- Nominado al premio U-more del Premio Japonés de Juegos de Mesa 2014
- Ganador del Voters’ Selection del Premio Japonés de Juegos de Mesa 2014
- Finalista para Juegos para Principiantes de la Jocul Anului en Rumania 2014
- Recomendado por los premios Juego del Año 2014
- Finalista del Gran Público en los premios Les Trois Lys 2014
- Ganador al premio Meeple’s Choice 2014
- Nominado al Spiel de Jahres en 2014
- Ganador del Tric Trac de Bronce en 2014
- Ganador del Mejor Juego de Mesa Nuevo de la UK Games Expo 2014
- Ganador del Premio al Mejor Juego para Adultos del Año de la Vouden Peli 2014
- Ganador del Mejor Juego Familiar en los Arets Spill 2015
- Nominado a Juego del Año en los As d’Or 2015
- Nominado al Gioco dell’Anno 2015
- Ganador al Premio Juego del Año de los premios Gra Roku 2015
- Ganador del Mejor Juego Familiar en los Guldbrikken 2015
- Ganador del Premio Hra Roku 2015
- Nominado en la Hungarian Board Game Award 2015
- Ganador al Mejor Juego Familiar en la Nederlandse Spellenprijs 2015
- Nominado a Mejor Juego de Cartas en la Origins Award de 2015
- Ganador del premio al Mejor Juego Corto en la MinD-Spielepreis de 2016
- Año: 2014
- Autor: Marc André.
- Ilustrado por: Pascal Quidault.
- Editado por: Asmodee.
- 35 fichas de piedras preciosas
- 5 fichas de oro
- 90 cartas de desarrollo
- 10 losetas de noble
- Reglamento
Lo mejor de Splendor
Splendor es un juego para la familia y amigos, pensado para que todo el mundo lo pueda jugar y, para que a todo el mundo le guste jugarlo y, lo ha logrado a la perfección gracias a lo siguiente:
- Reglas sencillas: En seguida vas a estar jugando, pues el reglamento son literalmente dos hojas. Sus mecánicas elegantes cumplen su cometido con la precisión de un reloj suizo. No sobra ni falta nada. Se lee rápido, se explica fácil y, se entiende a la primera. Es tan fácil, que incluso niños a partir de 6 o 7 años pueden jugarlo a pesar de que la caja recomiende jugarlo a partir de 10 años.
- Diversión asegurada: es un juego muy equilibrado y que, tiene la dosis justa de dureza para que a todo el mundo le encante. A la persona más inexperta en juegos de mesa, le supondrá un reto estratégicamente hablando, pero un reto asequible, no un reto inalcanzable que lo frustre. En cambio, para los jugadores más avanzados, la exigencia estratégica del juego, es la suficiente para que logre mantenerlos enganchados a la partida. En definitiva, un juego pensado a conciencia para que todo el mundo lo disfrute.
- Duración justa: con 30 minutos de juego, aunque según los jugadores, se puede ir un poco más, tiene una duración suficiente para que la partida resulte intensa y estimulante, pero no tanto como para que tanta emoción llegue a cansar. Además, es muy fácil hacer un hueco para jugarlo. De hecho, si disponemos de más tiempo, resulta que es uno de esos juegos a los que siempre apetece echar una partida detrás de otra.
- Funciona muy bien de 2 a 4 jugadores: Es algo que no se puede decir de la mayoría de juegos. Splendor, a 4 jugadores, ya es un juego que te va a parecer una maravilla, pero es que a 3 y a 2 jugadores, ¡aún es mejor!
- Alta rejugabilidad: No te cansas nunca de él. Las reglas de preparación de partida te aseguran que nunca vas a empezar una partida igual a otra, lo cual le da frescura al juego. Frescura que, por otra parte necesita, pues, te aseguro, que lo vas a querer jugar muchas veces.
Todo ésto, sumado a un buen diseño del interior de la caja, unos componentes de buena calidad, un arte exquisito y un precio muy razonable, lo convierten en una inversión segura para nuestra ludoteca.
Opiniones
A continuación, una selección de opiniones, útiles y reales, de gente que ha comprado el juego en Amazon.
¿Cómo se juega al Splendor ?
A continuación, te dejamos un vídeo con el que aprenderás lo básico para jugar a Splendor y, con el que te podrás hacer una idea general de como es el juego.
Debajo del vídeo, encontrarás una explicación más detallada y profunda sobre como se prepara una partida y como se juega.
– Preparación de la partida
Para preparar una partida a Splendor, primero tenemos que barajar cada mazo de desarrollo por separado y, formar una columna con ellos en el centro de la mesa, poniéndolos ordenados de menor a mayor.
Después, sacaremos las 4 primeras cartas de cada mazo y, las pondremos boca arriba al lado de su mazo correspondiente.
A continuación, mezclaremos las losetas de noble y elegiremos al azar tantas como jugadores +1 y, las colocaremos boca arriba por encima o, a un lado de las cartas. Por ejemplo, en una partida a 4 jugadores, se jugará con 5 losetas de noble (4+1). Las demás losetas las retiraremos del juego, pues no se utilizarán en ésta partida.
Por último, pondremos a un lado, al alcance de todos los jugadores, los 6 montones de fichas separados por su color.
Partidas a 2 o 3 jugadores
Para las partidas a 2 o 3 jugadores, tenemos que tener en cuenta los siguientes cambios durante la preparación de la partida.
2 JUGADORES | 3 JUGADORES | |
NOBLES | 3 | 4 |
PIEDRAS PRECIOSAS | 4 por color | 5 por color |
ORO | 5 | 5 |
– Desarrollo de los turnos
El jugador más joven será el que tenga el primer turno. Después, el orden del turno seguirá en el sentido de las agujas del reloj.
Durante su turno, un jugador, solo puede realizar una única acción a elegir de entre las 4 acciones disponibles:
- Coger hasta 3 fichas de piedras preciosas de distinto color.
- Coger 2 fichas de piedras preciosas del mismo color. Esta acción solo es posible realizarla cuando, en el momento de usar ésta acción, hay al menos 4 fichas disponibles de ese color.
- Reservar una carta + coger una ficha de oro.
- Comprar una carta de desarrollo.
Reglas referentes a las fichas
Existe un límite de fichas que puede tener en mano un jugador. Al final de su turno, ningún jugador puede tener más de 10 fichas (entre piedras preciosas y fichas de oro).
Si se da el caso de que un jugador tenga más de 10 fichas al final de su turno, éste tendrá que devolver fichas a la reserva general hasta quedarse con 10.
Es obligatorio que las fichas que posee un jugador estén visibles para el resto de jugadores en todo momento. Por un lado, esto ayuda a minimizar olvidos con la regla anteriormente explicada y, por otro, nos servirá para deducir la posible estrategia del resto de jugadores y adaptarnos a ella.
Reglas para reservar cartas
Como hemos dicho antes, con la acción de reservar una carta también cogeremos una ficha de oro (que también cuenta para el límite de 10 fichas que puede tener un jugador al final de su turno). De hecho, éste es el único modo de conseguir una ficha de oro. No obstante, se pueden seguir reservando cartas a pesar de que no queden fichas de oro en la reserva general. En ese caso, simplemente, se cogerá la carta a reservar, pero no se cogerá ninguna ficha.
La carta a reservar, la podemos elegir de entre todas las cartas que están boca arriba en el centro de la mesa o, podemos arriesgarnos, tentar a la suerte y, coger la primera carta de uno de los tres mazos y, en éste caso, sin mostrársela al resto de jugadores.
Inmediatamente después de reservar una carta que esté boca arriba en el centro de la mesa, debemos rellenar el hueco que ha dejado con la primera carta del mazo correspondiente. Si no quedan más cartas de ese mazo, no se repone ninguna carta.
Al igual que con las fichas, existe un límite de cartas reservadas que podemos tener. Como máximo, cada jugador solo puede tener 3 cartas reservadas y, el único modo de quitarlas de la reserva, es comprándolas (ver más adelante).
Reglas para comprar cartas
Un jugador que haga la acción de comprar en su turno, puede elegir entre comprar una carta de las que hay boca arriba en el centro de la mesa o, comprar una de las cartas que tiene reservadas.
Para comprar una carta, hay que pagar el coste que viene indicado en su parte inferior izquierda en forma de circulitos de colores con números dentro. El número dentro de esos círculos indica cuantas fichas de ese color hay que pagar (devolver a la reserva central) para comprar dicha carta. Normalmente, el precio de una carta será de varias fichas de varios colores, aunque algunas cartas se compran pagando fichas de un único color.
Las fichas de oro, se consideran comodines. Dicho de otro modo, una ficha de oro, en el momento de adquirir una carta, se considera como una ficha del color que queramos.
Toda carta que hayamos comprado nos otorgará un bonus para el resto de las compras que hagamos hasta el final de la partida. El bonus es la gema que viene dibujada en la parte superior derecha de la carta. Por cada bonus que tengamos de un color, se reduce en 1 el número de fichas de ese color que se necesitan para comprar una carta. Así, por ejemplo, si tenemos 2 bonus negros y 1 verde y, queremos comprar una carta que cuesta 2 fichas negras y 2 verdes, solo tendremos que pagar una ficha verde.
Una vez comprada una carta, la colocaremos en nuestra zona de juego. Conforme vayamos comprando cartas, las apilaremos por colores y, de tal modo que siempre sean visibles para todos, tanto el bonus, como los puntos de prestigio que otorgan.
Al igual que cuando reservamos una carta, siempre que compremos una carta del centro de la mesa, también tendremos que rellenar su hueco inmediatamente con la primera carta de su mazo hasta el momento que éste se agote.
– Final del turno
Al final del turno de cada jugador, se debe comprobar si, dicho jugador, cumple con los requisitos necesarios para obtener una loseta de noble de entre las que todavía estén disponibles.
Para obtener el favor de un noble, se necesitan tener compradas al menos tantas cartas de cada color como se indique en la loseta de cada noble. Por ejemplo, un noble puede pedir 3 cartas azules, 3 blancas y 3 verdes. Hasta que no tengamos todas esas cartas de esos colores concretos, no podremos reclamar para nosotros esa ficha de noble.
Cabe recalcar, porque es un error común en las primeras partidas que, los requisitos de un noble solo se pueden cumplir con cartas de desarrollo. Nunca con fichas.
Una vez comprobadas las exigencias de los nobles, si cumplimos con alguno de ellos, lo cogeremos de la zona central y lo colocaremos en nuestra zona de juego. No podemos, de ninguna manera, negarnos a recibir una ficha de noble.
Solo podemos obtener una loseta de noble por turno. En el caso de que estemos cumpliendo con los requisitos de varios nobles a la vez, deberemos elegir cual de ellos nos quedaremos ese turno. El resto, los podremos reclamar en nuestros turnos posteriores si es que todavía siguen disponibles.
– Fin de la partida
Las cartas de desarrollo pueden otorgar entre 0 y 5 puntos de prestigio y, todos los nobles por su parte, otorgan 3 puntos cada uno.
En el momento en el que un jugador llegue o sobrepase los 15 puntos de prestigio, se deberá terminar la ronda que está en juego de tal modo que, todos los jugadores hayan jugado el mismo número de turnos.
Una vez finalizada la última ronda, el jugador con más puntos será declarado vencedor. En caso de empate, ganará el jugador que haya comprado menos cartas de desarrollo. Si el empate persiste, los jugadores empatados comparten la victoria.
Expansión Cities of Splendor
La expansión de Cities of Splendor, está pensada, especialmente, para toda la gente que juega a Splendor muy regularmente con la misma persona o, grupo de personas. Además, es muy fácil acomodar todo su contenido dentro de la caja del juego básico para que sea más cómodo transportarlo. Solo es necesario aprovechar todo el hueco que queda debajo del inserto de la caja original.
Al contrario de lo que parece, Cities of Splendor, no es una simple expansión. Incluye, un token de jugador inicial, que no está de más y, 4 expansiones:
- Ciudades
- Puestos Comerciales
- El Oriente
- Fortalezas
Estas expansiones, le dan mucha variedad, frescura y rejugabilidad al juego y, según la que utilicemos, veremos que podremos modular un poco a nuestro gusto la duración y la dureza de las partidas.
– Ciudades
Es la expansión más sencilla y, la primera que se recomienda probar, pues es la que supone menos cambio respecto al juego base.
Además de darle un toque un poco más estratégico al juego, alarga un poco más las partidas. Entre esas dos cosas, esta expansión, acaba satisfaciendo la sensación de «ganas de más» que siempre se tienen al terminar una partida al juego base.
Como se juega
Para jugarla, se retiran los nobles de la partida y, se anula la regla de que, al llegar a 15 puntos de prestigio, se inicia el fin de la partida.
A cambio de todo lo anterior, la expansión incluye 7 losetas de ciudad a doble cara, por lo que dispondremos de 14 ciudades distintas en total. Al principio de la partida, en lugar de colocar en el centro a los nobles, se colocarán al azar 3 losetas de ciudad.
Cada loseta de ciudad tiene impresas unas condiciones de victoria distintas de las demás. Todas piden un número mínimo de puntos de prestigio a los que se debe llegar para finalizar la partida, pero la mayoría de cartas, también indican unos bonus mínimos con los que hay que contar.
Si al final del turno de un jugador se comprueba si tiene al menos tantos puntos como indica una loseta de ciudad y, además, cumple con los bonus que ésta requiere, deberá cogerla automáticamente. En el caso de cumplir los requisitos de varias cartas de ciudad a la vez, deberá elegir quedarse solo con una.
Cuando un jugador consigue una loseta de ciudad, se termina la ronda en juego para que todos los jugadores hayan jugado el mismo número de turnos durante la partida y, después, la partida termina. Si algún jugador más, cumple con los requisitos de otra loseta de ciudad, la deberá coger también.
Una vez finalizada la última ronda, de entre los jugadores que posean una carta de ciudad, el que tenga más puntos de prestigio, será declarado vencedor de la partida.
Conclusiones
Al retirar los nobles del juego, se hace más difícil conseguir puntos, alargando así un poco más la partida y, dando más protagonismo a las cartas de nivel 2 y de nivel 3 del que tienen en una partida normal, lo cual se agradece.
Por otro lado, tener varios objetivos distintos a por los que poder ir para ganar la partida, dota al juego de algo más de estrategia y, nos brinda una mayor posibilidad de adaptarnos mejor a los giros que el azar puede generar durante la partida.
– Puestos comerciales
Sencilla y elegante, aporta dinamismo y velocidad a nuestras partidas a la par que, le da una vuelta de tuerca más al juego.
En qué consiste
Se compone de un tablero con los distintos puestos comerciales y, 5 fichas de escudo para cada jugador.
Cada puesto comercial da un poder especial distinto a todo jugador que cumpla con sus requisitos.
Al final del turno de cada jugador, después de comprobar si se obtiene el favor de algún noble, se debe comprobar si dicho jugador cumple con los requisitos de algún puesto comercial. En caso afirmativo, colocará uno de sus escudos en la casilla correspondiente para señalar que ya ha cumplido con esos requisitos y, que ya puede beneficiarse de su poder especial desde ese momento, hasta el final de la partida.
Los poderes no son exclusivos para el primer jugador que los consiga. Todo jugador puede acceder a todos los poderes a partir del momento en que consiga los requisitos que exigen.
En total hay 5 puestos comerciales y, por lo tanto, hay 5 poderes disponibles. Los 3 primeros poderes, a la práctica, nos dan acceso a más fichas, ya sea de un modo u otro. Los otros 2, nos hacen ganar directamente puntos de prestigio.
En resumen
Con los poderes, nos costará menos tiempo acumular las fichas necesarias para ir comprando cartas y, además, obtendremos puntos de prestigio extra que no tendríamos en una partida normal. Por todo ello, las partidas resultarán más rápidas.
Por otro lado, ésta expansión aumenta un nivel la dificultad y la estrategia del juego. Saber qué poder debemos tratar de obtener primero según la disposición de la partida, saber a cuáles otros podemos optar, en qué orden nos interesa conseguirlos y, saber cuando nos conviene más utilizar uno u otro en cada momento, marcan la diferencia en las partidas en las que se incluya ésta expansión.
– El Oriente
Aumenta el nivel de estrategia de las partidas, reduce el número de turnos necesarios para alcanzar los objetivos y, con las herramientas extras que nos da, podemos minimizar los efectos nocivos de los bloqueos que pueden surgir durante una partida normal debido al orden en el que aparecen las cartas en el mercado.
¿Qué añade?
Ésta expansión, simplemente añade 3 nuevos mazos de cartas de desarrollo, uno de cada nivel. Se colocan a un lado y, siempre que sea posible, habrá 2 cartas de cada nuevo mazo, boca arriba, disponibles para ser compradas o reservadas de la forma habitual.
Las nuevas cartas tienen bonus y habilidades distintos a las cartas del juego base, ello supondrá un pequeño esfuerzo más en aprender que hace cada nuevo tipo de carta y a cómo sacarle el mayor partido.
Conclusión
Al tener 6 cartas más en el mercado y, además con bonus y/o habilidades nuevos, supone ampliar nuestras opciones y, por lo tanto, el tiempo de análisis de las mismas y la diversión.
Por otro lado, la mayoría de los bonus y beneficios que aportan las nuevas cartas, aceleran la partida ya que por ejemplo hay cartas que dan bonus dobles, cartas que equivalen a dos fichas de comodín o, cartas con bonus especiales que copian a un bonus que hayamos comprado anteriormente (librándonos de la desagradable situación que suele darse cuando necesitamos un color concreto de bonus y, no hay cartas de ese color concreto disponibles para ser compradas).
También, hay beneficios al comprar ciertas cartas, como por ejemplo, el beneficio de poder comprar una segunda carta en ese mismo turno y, sin pagar nada por ella, totalmente gratis o, por ejemplo, poder reservar una loseta de noble. Estas cartas pueden dar lugar a hacer nuevas jugadas muy potentes aumentando la estrategia y la emoción de la partida.
– Fortalezas
Por último, la expansión de fortalezas, la más estratégica, la más dura y, la que más cambia y alarga el juego. Especialmente pensada para el disfrute de los jugadores más veteranos y competitivos de Splendor.
¿Cómo funciona?
La idea es muy sencilla, lo único que se añade a la preparación de la partida es que, cada jugador coge 3 fichas de fortaleza del mismo color.
Cada vez que un jugador compra una carta, puede elegir hacer una de las siguientes dos acciones:
- Colocar una fortaleza propia encima de una carta del mercado que no contenga fortalezas enemigas.
- Devolver a otro jugador una de sus fichas de fortaleza que esté encima de una carta del mercado.
Las fortalezas, por su parte, tienen 2 habilidades:
- Una carta con, al menos, una fortaleza encima, solo puede ser comprada o reservada por el jugador propietario de dicha fortaleza.
- Si un jugador acumula sus 3 fortalezas en una carta, podrá realizar una segunda acción en su turno para comprarla, siempre y cuando, pague su coste de la forma habitual.
¿Cómo cambia eso el juego?
Con algo tan sencillo, el juego cambia muchísimo y se convierte en un juego de más peso, con más duración, más estrategia y mucha más interacción entre jugadores. Recomendado especialmente para verdaderos fanáticos de Splendor.
Sobre el papel, parece que se añade poca cosa al juego, pero, a la práctica, cada vez que compramos una carta, obtenemos una acción parecida a reservar una carta y, dicha acción la podemos usar para entorpecer y retrasar a nuestros rivales o, asegurar una carta fácil para nosotros y que, nos regalará otra acción más si la compramos. Dicho de otro modo, cada vez que compramos una carta, es casi como si sacáramos un turno de ventaja a los demás.
Al final, eso convierte al juego, ya desde el primer turno, en más exigente y despiadado, pues los errores se pagan muy caros. Una mala decisión, ya sea haciendo una acción normal o, usando las fortalezas, supone desperdiciar un turno mientras que, los demás, si lo hacen bien, pueden llegar a hacer entre 2 y 4 acciones por turno. Si acumulamos varios errores y los rivales varios aciertos, la ventaja que acabarán sacándonos será tanta, que no conseguiremos remontar, así que hay que pensarse muy bien todas y cada una de las jugadas.
– ¿Son combinables las expansiones?
Técnicamente, las distintas expansiones son independientes pero, a la práctica, si queremos darnos el gustazo, las podemos combinar entre sí.
Hay que tener en cuenta que, no todas las expansiones son compatibles de entrada. El principal problema para ellos es que, la expansión «Ciudades» está diseñada para jugar sin nobles y, en cambio, la de «Puestos Comerciales» y la de «El Oriente» están pensadas para jugar obligatoriamente con nobles. Dicho de otro modo, en «Ciudades» la puntuación requerida, está equilibrada teniendo en cuenta que no hay disponibles puntos extra como los que se consiguen con los nobles o, los que otorgan los poderes de la expansión «Puestos Comerciales». Por ello, al mezclar «Ciudades» con otras expansiones que no sean la de «Fortalezas», el equilibrio se rompe y la partida puede resultarnos demasiado corta hasta llegar al punto de perder la gracia.
Las posibles combinaciones son:
- Ciudades + Fortalezas
- Puestos Comerciales + El Oriente
- Puestos Comcerciales + Fortalezas
- El Oriente + Fortalezas
- Puestos Comerciales + El Oriente + Fortalezas
Por otro lado hay que decir que, es posible compatibilizar la expansión «Ciudades» con las losetas de noble, pero para ello, necesariamente tendremos que implementar alguna regla de la casa que consiga mantener el equilibrio de la partida. Para llegar al equilibrio deseado, seguramente tendremos que jugar varias partidas de prueba para ir ajustando las reglas a nuestro gusto según qué combinación de expansiones estemos utilizando.
Hay muchas reglas con las que podemos experimentar para éste fin pero, la más sencilla que podemos utilizar es, la de aumentar artificialmente los puntos que piden las losetas de ciudad. Jugando con eso, podremos compensar los puntos extra que obtendremos durante la partida gracias a los nobles y, a los poderes de los «Puestos Comerciales».
– Conclusión
Así pues, con Cities of Splendor podremos variar nuestras partidas añadiendo una de las 4 expansiones por separado, cosa que se recomienda al principio o, podremos combinarlo con varias expansiones a la vez. En definitiva, llevaremos el juego a otro nivel y, conseguiremos una rejugabilidad infinita.
Splendor vs Splendor Marvel
En Splendor Marvel trataremos de hacernos con las Gemas del Infinito antes que el resto de jugadores. Para ello, reclutaremos a varios superhéroes en nuestro equipo (cartas de desarrollo en el juego normal) y, nos haremos con el control de lugares estratégicamente importantes (el equivalente a las losetas de noble del juego original).
Como buen Eurogame, Splendor es lo que se conoce como «un juego con el tema pegado». O lo que es lo mismo, un juego que, principalmente, se ha diseñado centrándose en las mecánicas y, en la buena interacción de las mismas y, ya después, se le ha añadido una temática.
Gracias a ello, el juego es fácilmente versionable y, por eso, hoy en día, podemos disfrutar de un Splendor en versión Marvel.
– ¿Para quién está pensado?
Para quien no tenga Splendor en su ludoteca, la versión Marvel es, sin duda, una gran elección para cubrir ese hueco.
De hecho, como opinión personal, si hay que elegir entre el juego original y la versión Marvel, solo recomendaría el juego base a alguien que, sí o sí, necesite o quiera ampliarlo con Cities of Splendor en un futuro, ya que, la expansión, solo es compatible con el juego original. En cualquier otro caso, siempre recomendaría la versión Marvel.
Lógicamente, también alguien muy fan de Splendor, aunque ya tenga el original con expansión, va a querer sin duda hacerse con la versión Marvel, porque, además de la estética de ese universo, que siempre es un punto a favor para mucha gente, incluye unos cambios más que interesantes a nivel de juego. Así que, cualquiera al que le encante el Splendor original, disfrutará de lo lindo con la versión Marvel pues, dispondrá de una nueva y diferente forma de jugar a uno de sus juegos favoritos.
– ¿En qué cambian las reglas?
Primeramente, se pone una loseta de lugar (noble) menos que en el juego normal y, a cambio, se pone la ficha de «¡Vengadores, reuníos!» . Igual que los lugares, la loseta de los Vengadores también aporta 3 puntos a quien la posea pero, no se consigue con los bonus de colores como pasa con las ubicaciones, si no, acumulando los iconos de Vengadores que dan ciertas cartas. El primer jugador en conseguir tres de esos iconos, se lleva la loseta.
Además, la loseta de Vengadores, tiene otra peculiaridad respecto a las losetas de lugar y es que, va cambiando de manos durante la partida. Cuando un jugador acumula más iconos de Vengadores que el actual poseedor de dicha loseta, se la quita. Si algún otro jugador vuelve a superar a éste último, se hará con ella y, así, hasta el final de la partida.
Éste, de por si, es un cambio muy interesante, pero el cambio más importante a nivel práctico, es que se cambia la condición que desencadena el final de la partida. En lugar de simplemente tener que llegar o superar los 15 puntos, en Splendor Marvel hay que:
- Llegar como mínimo a 16 puntos o más.
- Comprar al menos una carta de cada color.
- Comprar al menos una carta de nivel 3 para así obtener la gema del tiempo.
Lo de los 16 puntos es un ligero cambio, pero puede afectar más de lo que parece pues, para empezar, en el juego original, muchas partidas finalizan por llegar exactamente a 15 puntos, así que éste simple cambio hará que algunas partidas duren alguna ronda más de juego.
Eso, sumado a que la ficha de Vengadores puede cambiar de manos durante la partida, puede generar situaciones muy emocionantes, puesto que el jugador que ha desencadenado el final de la partida, puede perder durante la última ronda dicha loseta y, con ella, los 3 puntos que otorga.
Eso puede hacer, por ejemplo, que dicho jugador deje de cumplir las condiciones de victoria al ya no llegar a los puntos necesarios y, si nadie más llega a cumplir las condiciones de victoria, el fin de la partida se desactivaría y se seguirían jugando más rondas.
También podría pasar que el vencedor acabase siendo el jugador que le arrebató la loseta al primero al llegar, gracias a ella, a los puntos necesarios o, incluso, podría ganar otro jugador distinto, que pudiera conseguir cumplir todas las condiciones y acumular más puntos que ningún otro jugador al comprar una carta en su último turno (como ya pasa a veces en el Splendor normal).
Por otro lado, lo de necesitar una carta de cada color, es algo que fácilmente se conseguía en cualquier partida, así que no es un cambio sustancial a nivel de juego, pero liga con la temática ya que se supone que tratamos de conseguir las distintas Gemas del Infinito.
Por último, el cambio de necesitar comprar una carta de nivel tres obligatoriamente para conseguir la última gema, la del tiempo, es más importante de lo que parece a simple vista.
Por un lado, la gema del tiempo se representa con una ficha verde que hay que coger. Dicha ficha no se puede gastar para nada, pero se tiene en cuenta para el máximo de 10 fichas que se puede tener en la mano.
Por otro lado, y más importante, éste cambio se ha hecho para equilibrar el juego debilitando a una de las estrategias más potentes y populares que se usan en el juego original.
En dicha estrategia, se compran muchas cartas de nivel 1 al principio, para así conseguir cuanto antes y del modo más fácil, el favor de los nobles (con sus 3 puntos) y, acumular de paso unos bonus potentes.
A continuación, el resto de puntos necesarios para ganar se consiguen fácilmente juntando unas pocas fichas para comprar cartas de nivel 2 que, en este punto de la partida, serán muy accesibles gracias a la gran cantidad de bonus que habremos acumulado.
Ésta estrategia funciona extremadamente bien en el juego base y, convierte a las cartas de nivel 3 en meramente testimoniales en muchas partidas. Con ésta nueva regla, las cartas de nivel 3 ganan un lugar de relevancia en todas las partidas y, se da más variedad estratégica al juego.
Fundas para las cartas del Splendor
Hablando de fundas, una cosa muy buena que tiene Splendor, es que, el hueco del inserto para las cartas, está pensado para poder guardar las cartas con fundas normales (no premium, que son muy gruesas), con lo que, si enfundamos las cartas, no habrá que retirar el inserto de la caja, como si nos pasa en otros juegos.
Tanto el juego base, como la verisón Marvel, contienen 90 cartas y, para protegerlas, necesitaremos fundas de tamaño 63,5 x 88 mm como, por ejemplo, las Ultra Snug de Mayday o similares.
Por su parte, la expansión de Cities of Splendor añade, entre otras muchas cosas, 30 cartas del mismo tamaño que el juego base.